El amor es una planta que nunca debe ser descuidada o acaba marchitándose sin remedio. Poco planes hay mejores para sorprender a tu pareja que una buena escapada romántica, que incluya cenas en restaurantes de ensueño, paseos de la mano por la orilla de la playa durante una agradable noche o disfrutar abrazados mientras disfrutan de vistas espectaculares en un lugar idílico. Y para esto, Barcelona es perfecta, pues ofrece una gran variedad de oportunidades que harán que la llama de la pasión y el cariño nunca deje de arder. Si no conoces bien la ciudad y estás interesado en descubrir lugares donde organizar el mejor plan romántico posible, no te preocupes, vamos a intentar echarte una mano.
Comienza la tarde con un paseo agradable por alguno de los numerosos parques de la ciudad. Nuestra sugerencia es que vayas hasta el El Laberint d’Horta, situado en el nordeste de la ciudad. Se trata del jardín más antiguo de la ciudad, concretamente de principios del siglo XVIII, lo cual le confiere ya un romanticismo añadido. Lleva a tu pareja a través de sus preciosos caminos y descubre sus cascadas y esculturas, antes de sumergirte por los intrincados caminos del laberinto de cipreses. Llega hasta el centro del mismo, donde encontrarás una estatua en honor del dios Eros, que según la mitología griega es el dios del amor y de la atracción sexual, así que en las circunstancias de las hablamos es una parada más que recomendable, ¿no crees?
Recorre los lugares más románticos y especiales de la ciudad
Desplázate entonces al Parque Güell, lugar de visita obligatoria si eres un nuevo visitante de la ciudad. Además de gozar de toda la magia y la fantasía que transmite este lugar, diseñado por Antoni Gaudí, puedes aprovechar para recorrer el Viaducto de los Enamorados y, finalmente, descansen un poco sentados en los bancos ondulados, desde donde disfrutar de unas excelentes vistas a la ciudad.
Seguimos la ruta hacia el centro de Barcelona, y quizá les apetezca hacer una parada en Xocoa, situada en la calle Petrixol. Un auténtico paraíso del chocolate, donde tomar un delicioso refrigerio y charlar tranquilamente, además de darse los necesarios arrumacos y los correspondientes besos, antes de ir a cenar.
Comienza a entrar el hambre y ha llegado el momento de comer. Al salir de la chocolatería damos un breve paseo hasta llegar al pintoresco y romántico barrio de Born. En este precioso lugar de la ciudad se encuentran algunos de los restaurantes más románticos de Barcelona. Te sugerimos comer en Pla Restaurant, situado en la calle Bellafila, número 5, donde podrás degustar la mejor cocina con productos del mediterráneo, y con algún toque asiático. Todo esto en el ambiente más acogedor, y donde las velas toman un especial protagonismo a la hora de iluminar el sitio.
Un recorrido por la playa como gran final de fiesta
La penúltima etapa del viaje te llevará hasta la playa de la Barceloneta. Descálcense y paseen por la orilla de la playa cogidos de la mano. Si entra la sed, o simplemente las ganas de tomar algo fresquito al amparo de la brisa del mar, la terraza La Deliciosa es una opción perfecta disfrutar de los momentos finales del recorrido junto a un delicioso cóctel.
Como es lógico, algo que no debemos descuidar de ninguna manera es el lugar en el que pasar la noche, que debe ser la guinda al pastel. Existe toda una gran oferta de establecimientos hoteleros románticos, y cerca de la playa de la Barceloneta, donde nos encontramos, Sixtytwo Hotel, en pleno Paseo de Gracia. Reserva una la suite y disfruta de unas increíbles vistas, jacuzzi y una terraza con cómodas hamacas. Un escenario único para un final de fiesta por todo lo alto.
Barcelona es una ciudad llena de posibilidades y rincones románticos. Aquí te hemos sugerido algunos, que van de un lado a otro de la ciudad. Sigue nuestra ruta, o modifícala a tu gusto en algún punto si encuentras alguna opción mejor. La cuestión es que, hagas lo que hagas, disfrutes de una día único junto a la persona que amas.